Microsoft informó este viernes que el fallo informático mundial que paralizó diversos sectores; desde aerolíneas, bancos y hospitales, se debió a una actualización defectuosa del sensor CrowdStrike Falcon, que afectó a los sistemas operativos Windows. Este incidente ha impactado tanto a plataformas locales como a varias en la nube, incluyendo Azure, AWS y Google Cloud, causando un caos mundial.

Ante esta situación, el gigante tecnológico aseguró que se implementó una solución de manera rápida, además de ofrecer soporte técnico especial para ayudar a los clientes a recuperar sus plataformas, quienes tendrían que hacerlo manualmente.

Pero el incidente no concluye ahí, múltiples compañías debieron afrontar demoras y cancelaciones de vuelos y citas médicas, pedidos no procesados y otros inconvenientes que podrían tardar días y hasta semanas en solucionarse.

Repercusiones

Según CrowdStrike Intelligence, la empresa líder en ciberseguridad, aunque el reciente incidente no se trata de un ciberataque, ciertos actores maliciosos han aprovechado la situación como señuelo. Se han registrado actividades realizadas por ciberdelincuentes, incluyendo el envío de correos electrónicos de phishing haciéndose pasar por el soporte de CrowdStrike y la suplantación de identidad del personal mediante llamadas telefónicas.

Se ha informado también, de personas que se presentan como investigadores independientes, afirmando tener pruebas de que los problemas técnicos están relacionados con un ciberataque y ofreciendo soluciones. La compañía recomienda a las organizaciones comunicarse con sus representantes exclusivamente a través de canales oficiales y seguir las pautas técnicas proporcionadas por sus equipos de soporte.

En el país, los vuelos internacionales fueron los más afectados, y se anticipa que las consecuencias del incidente se prolongarán los próximos días mientras las empresas trabajan en restablecerse. Un caso notable es el del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), que informó el viernes por la tarde sobre demoras en cientos de vuelos, con retrasos que podrían extenderse durante todo el fin de semana.

Debido al caos que afectó a empresas de múltiples sectores a nivel mundial, las acciones de CrowdStrike experimentaron una caída del 11% al cierre de la jornada. Elon Musk manifestó su enojo contra Microsoft y calificó el incidente como “el mayor fracaso informático de la historia”.