Una de las periodistas y escritores más reconocidas de México murió este jueves 21 de diciembre de 2023. Cristina Pacheco dejó este mundo terrenal a los 82 años, pocas semanas después de anunciar su retiro. La noticia fue confirmada por su hija Laura Emilia Pacheco mediante sus redes sociales.
“Con hondo dolor, mi hermana Cecilia y yo participamos del fallecimiento de nuestra adorada madre Cristina Pacheco”, escribió su hija.
Fue el pasado 1 de diciembre que la periodista informó en su programa que por problemas de salud tenía que suspender, al menos de manera momentánea, su programa “Aquí nos tocó vivir”, el cual llevaba 45 años al aire.
La partida de Cristina Pacheco deja luto en el mundo del periodismo, la mujer dejó una importante huella en este ámbito. Lo mismo entrevistó a grandes figuras como Chabela Vargas y Chabelo, como a las personas trabajadoras de la Ciudad de México, quienes son la médula de esta urbe.
Diversos periodistas y dependencias se han pronunciado por esta irreparable pérdida, dando las condolencias a sus familiares y expresando la manera en la que Pacheco los impactó.
La Secretaría de Cultura del Gobierno de México se pronunció en redes sociales, donde escribió que “lamenta el sensible fallecimiento de Cristina Pacheco, ensayista, narradora, locutora y presentadora de televisión. Colaboró en múltiples periódicos y revistas, como La Jornada, El Universal, Excélsior y Uno más uno; fue jefa de redacción de la Revista de la Universidad de México; y fue titular de programas radiofónicos de Radio Centro, XEW, Radio Fórmula y Radio Capital. Además, condujo los programas «Conversando» y «Aquí nos tocó vivir», icónicas producciones de Canal OnceTV, que guardan su figura en la memoria colectiva del país y en el corazón de las y los mexicanos”.
El legado de Cristina Pacheco
Las crónicas, entrevistas y la manera en que Cristina Pacheco abordó “los muchos Méxicos” quedarán para la posteridad y forman parte del legado que la periodista dejó a nuestro país y el resto del mundo.
“Aquí nos tocó vivir” fue reconocido en 2010 por la UNESCO, como patrimonio inmaterial por su aportación a la memoria de la vida de la Ciudad de México y otras regiones del país.
La manera en que dio voz a tantas personas, en la que mostró las distintas realidades de un país y de una ciudad que cambió tanto de cuando ella empezó, quedó en la memoria colectiva de México.
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